Es
claro y evidente que el comportamiento de los alumnos no se puede
tolerar, pero a su vez ,es necesario decir, que muchos de estos alumnos no
conocen las herramientas necesarias para enfrentarse a actuaciones como las que
se han producido en el caso. Es responsabilidad nuestra por tanto, generar un
clima adecuado en nuestras aulas, ofreciéndoles estrategias y procedimientos
para superar estas situaciones, con ayuda de los alumnos y el apoyo de sus
familias. Aunque sin olvidar que con el sistema educativo tan cerrado e inflexible
que tenemos no ayude a desarrollar nuestro objetivo de la convivencia escolar.
No hay comentarios:
Publicar un comentario